Los Artículos de la Confederación establecieron un gobierno federal débil. El gobierno federal no tenía poder para recaudar impuestos, regular el comercio ni hacer cumplir las leyes. En cambio, los estados eran soberanos e independientes. El gobierno federal sólo podía actuar con la cooperación de los estados.
Los Artículos de la Confederación fueron ineficaces porque el gobierno federal no tenía poder para hacer cumplir sus leyes. Esto llevó a una serie de problemas, incluyendo la inflación, el desempleo y la deuda nacional. En 1787, los delegados de los estados se reunieron en Filadelfia para revisar los Artículos de la Confederación. El resultado de esta convención fue la Constitución de los Estados Unidos, que creó un gobierno federal más fuerte.